domingo, 18 de septiembre de 2016

Si tuviese siete vidas, como un gato.

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Domingo de fin de verano por la Sierra de Madrid, sin más motivo que querer estar Tranquilo, sentado frente al Lago de Santillana, cielo azul con reflejos de sol brillante y buen tiempo.
 




 
En el viejo equipo suena a lo lejos música de Sabina, buen café recién hecho y copita de ron a la vera, … reviso con parsimonia albums con eternas fotos de años pasados, unas son en color, otras en blanco y negro, fotos de nuestra infancia en Lima con Mamá Toyita y Papá Carlitos, con mis hermanos, fotos con los amigos, de aquellos viajes de juventud, de la Familia que formamos en Madrid, los chicos arropaditos en nuestros brazos, jeje, pero ya crecieron.
 
Tiempo que no tenía motivación para escribir, ahora tal vez tampoco, … o sí, dicen los gallegos que ni sí ni no, que uno nunca sabe ... Lo cierto es que pensando sin mucha intención la letra de alguna canción vino a mí la idea, por un ínfimo momento, de que pudiese tener las Siete Vidas que tiene un Gato...
 

Que como por arte de magia, de pronto pudiese en la siguiente Vida corregir los errores que he cometido en ésta, poder llevarme en la mochila a la siguiente los aciertos, las experiencias y consejos que recibí … Partir en la próxima desde donde me quedé en ésta de ahora. Sería increíble, a la tercera vida seguro ya será lo máximo que podamos imaginar …
 
Y entonces, de pronto, como después de que anuncian el resultado de la Lotería, caigo en la cuenta de que No soy un Gato … Con lo que está claro, la única Vida que voy a Vivir es ésta. Y estoy donde estoy, Hoy, aquí, con mi realidad y mi Presente …
 
Por delante me quedan si Dios quiere muchos días, buenos años por Vivir. Ya que la opción de ser un gato parece que no me vale, recapacito, pienso y decido que usaré el Plan B, ¿sabes?, siempre, siempre hay un Plan B …
 
Tengo en mis manos algo de verdad valioso, la oportunidad de revisar, ir afinando, prepararme, corregir y decidir lo que quiero para estos próximos años que anuncian con un persistente y sereno pitido su llegada a nuestra imaginaria y vieja estación de tren.
 
¿Qué quiero para esos próximos años?, … Quiero afecto, cariño, muchos abrazos, pequeñas alegrías, algo de buen sexo, estar cercano con mi Familia, en la que nací y con la que formé, reunirme de nuevo con buenos amigos de siempre, viajar, lo justo y tal vez un poquito más …
 
Quiero Compartir, Sentir, alegrarme por la mañana porque empieza el Día, dar Gracias a Dios cuando éste termina … Quiero sentir día a día Tranquilidad, Alegría, mejor si es pequeña y frecuente, sin grandes castillos ni fuegos artificiales.
 
Vaya plan que tengo en frente mi buen amigo, cierto?. Prometido que ya empecé, iré pensando los pasos que debo dar para conseguir hacer realidad todo esto que quiero para esos nuevos años por venir, mientras espero con ansias que alguien descubra el Túnel del Tiempo, o la fórmula mágica para tener siete vidas, como los buenos de los gatos.
 
Ya me contarás de tus planes, de lo que sientes, si me quieres escribir soy vecino de Sabina, vivo en el número siete de calle Melancolía,
 
Recibe un afectuoso abrazo de este aprendiz de Don Gato.
CARLOS LOZANO.
 
 

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